jueves, 18 de junio de 2015

Atenas, con aire acondicionado

Agosto, 2014.

Cruzando los Balcanes, bajando a Grecia.
Después de un par de horas en avión desde Praga, cruzando todos los Balcanes, hasta llegar al renovado Aeropuerto Eleftherios Venizelos. Bien moderno el aeropuerto, ya que este fue renovado para los Juegos Olímpicos del 2004 y se notaba. Queda a unos 30 minutos de la ciudad en Metro, hay una estación que deja justo en el aeropuerto, aunque se debe tomar un ticket especial, porque obvio, del aeropuerto siempre los pasajes son más caros, en este caso fueron €7.

Comenzaba el griego

El plano de la rotonda, en griego.
El metro de Atenas es bastante simple, solo 3 lineas, pero bastante extendidas las unas de las otras, anduvimos unos 30-40 minutos hasta llegar a las partes más lejanas de la ciudad Nosotros íbamos rumbo a Metaxourgio (En griego Μεταξουργείο), al bajarnos vimos una zona entre residencial y con muchos buses, nos parecía cercana a la Estación Central de Santiago, aunque nosotros llegamos cuando eran las 15:00, el calor era increíble y las calles estaban vacías. Procedimos a buscar la calle Psaron, lugar donde estaba nuestro hotel, Bueno, acá empezaron los problemas con el griego, ya que en los mapas estaba el nombre escrito en el alfabeto latino, pero la señalética de las calles estaba en el alfabeto griego, un alfabético histórico que dio origen al nuestro, el alfabeto griego, que en la práctica costaba mucho entender. Después de dar un par de vueltas por la rotonda de Metaxourgio, logramos ubicar nuestro hotel, el cual nos gustó mucho pues era sencillo y por sobre todo, barato. Era el Hotel Cosmos. Estaba a dos cuadras de metro, cerca de la estación de trenes Larissa y el precio estaba bastante adecuado.

Cerveza griega
Después de dejar nuestras maletas, procedimos a localizar un lugar para almorzar, el recepcionista nos recomendó caminar un par de cuadras al norte a orillas de la Iglesia del Apóstol Pablo, miramos a más detalle el barrio, era una mezcla de un lugar antiguo con esfuerzos de ser restaurado, encontrabas casas que se podían caer junto a lindos lugares restaurados, se notaba algo solitario, pero seguro. Luego del almuerzo y del recorrido por el barrio, tomamos el metro hasta la zona más turística de Atenas. Es complicado entender el orden de Atenas, son varios cerros que rodean la ciudad y que desde hace 3.000 años se empezó a poblar hasta el día de hoy. Un centro típico no existe, o sea, en el papel podría existir cercana a la zona de la Plaza de la Constitución en el metro Syntagma (Σύνταγμα en griego) Atenas es irregular en todo sentido, organización, horarios, centros, zonas típicas y a grandes niveles es muy desordenado, pero como a la usanza griega, siempre se sentía ese ambiente de tranquilidad, acá puede estar explotando la ciudad, pero verás a todo el mundo caminando tranquilamente con cara de no apuros. Como realmente Atenas tiene tiene varias zonas típicas, vas a encontrar más gente en otras partes. Decidimos partir por la zona cercana al Partenón. que no es lo mismo que Acrópolis, aunque se suele confundir, siendo la Acrópolis la totalidad del "cerro" y el Partenón el edificio característico de éste. Bajamos del metro Acrópolis, nos dimos cuenta que para llegar al Partenon, había que subir un gran cerro, en verdad enorme. En el camino de subida nos topamos con el Museo de la Acrópolis. No entramos porque ya habían cerrado (10:00-20:00) La entrada sale 5 euros, pero lo más lindo del lugar es su cafetería, porque el museo no tiene mucho que exponer. Comentaba una niña de allá es que no tienen nada en el museo, porque los ingleses y franceses se robaron todo en años anteriores, es más, muchos atriles están vacíos y dicen "el original está en el museo británico de Londres". Hasta la época los intentos para repatriarlos han sido ignorados por los británicos y franceses.

Comenzamos a subir la Acrópolis hasta su entrada,  que estaba con mucha gente, era la noche de la "Superluna", un fenómeno que se da una vez cada 15 a 20 años, donde la Luna se acerca a la tierra y se ve más grande. Nos animamos a subir con el montón de gente que había a una colina cercana, donde nos ubicamos a la orilla de un acantilado donde teníamos vista a la zona sur de la ciudad y de frente a nosotros, el templo de Niké, del año 400 a.C. muy bien conservado y con un imponente blanco. Ya oscureciendo apareció la luna detrás, todo un evento donde las cámaras de fotos empezaron a apuntar, un buen relajo después de varios días de viaje.

Templo de Niké en lo alto de la Acrópolis 
Visión general del Acrópolis.
Apareciendo la Superluna
Genial visión de la Acrópolis
Visión de Atenas mirando al Pireos.
La Superluna
Luego de esta maravilla, bajamos rodeando el cerro, algo extraviados llegamos al barrio de Plaka, una zona artística y con muchos callejones, llenos de cafeterías y bares, paramos obviamente en uno para pedir unas cervezas con un souvlaki (Σουβλάκι en griego).Básicamente un anticucho de carne mezclada con verduras y acompañados con una salsa de yogurt. Hay varias cosas de la gastronomia griega que se parece a la turca, es cosa de entender que los otomanos estuvieron en Grecia cerca de 500 años, asi que si encuentras un plato en griego y te llega un doner kebab, no se extrañen. Volvimos a casa en taxi, la crisis en Grecia se nota, cuando quieres saber sobre la economía de una ciudad, mira cuantos taxis andan en las calles, es proporcional, en Atenas habían muchos, un recorrido de vuelta que salió 5/6 euros.  Era el primer día en Atenas, había que descansar.

Los 35 grados y recién era mediodía
Al día siguiente tomamos un Freetour, realizado por una relajada niña griega que había vivido en España. Ella nos hizo recorrer el Atenas alejado del Partenon inicialmente, para terminar cerca de éste. Primero caminamos por Monastiraki, por afuera del Templo de Zeus, por el arco de Adriano y por el estadio Panatinaiko, una impresionante reconstrucción del año 1896 para los primeros juegos olímpicos de la era moderna, realizado completamente de mármol. Nos fuimos por diversos parque que no estaban en los mapas y conocimos la plaza Syntagma, o mejor dicho la plaza de la constitución, el verdadero centro de la Grecia moderna, el parlamento está a espaldas de este y pueden ver la tumba del soldado desconocido griego con el discurso fúnebre de Pericles, padre de la Grecia Antigua.

El templo de Zeus
El arco de Adriano
El estadio Olímpico
El congreso
Soldados haciendo el servicio militar, allá es obligatorio.
La "mini" Iglesia Bizantina

Barrio de Monastiraki

Vamos subiendo como los caballeros del Zodiaco
Nos tocaba la Acrópolis en detalle, ya era la hora de más calor y fue una buena idea por varias razones, en especial para evitar la horda de turistas que evita el calor y en este punto nos fue bien. El calor era entre 35° a 40° a la sombra y esto, nos ayudó porque se notaba una menor cantidad de gente en comparación con el día anterior en la tarde noche. Existe una entrada que sale €12, puedes dejarlo en €6 si tienes algún carnet de estudiante, en la entrada te venden tour y guías que son muy caros, entre los €50 hasta los €100, obviamente los omitimos, pero si van en un grupo pueden negociar algo. La entrada incluye acceso a la Acrópolis, pero también sirve para entrar a la Ágora antigua, la Ágora Romana, el Teatro de Dionisio, el Kerameikos, el Templo de Zeus Olímpico y la Biblioteca de Adriano. Muchas de estas construcciones se conservan de manera parcial, incluso en mismo Partenon, de otras solo se conservan ruinas. Existen intentos del gobierno griego de restaurar diversas construcciones, pero a primera vista, parece una labor titánica ya que en toda la ciudad pareces encontrar construcciones de épocas pretéritas. Es importante destacar que muchas de estas construcciones fueron realizadas en la Grecia clásica, pero otras fueron realizadas en la época romana, especialmente en el gobierno del emperador Adriano. Después de este retoque cultural, subimos a la parte alta de la Acrópolis. En el camino nos encontramos con Odeón de Herodes Antico y con el Teatro de Dionisio, lugar donde se dieron a estreno las obras cumbres de Sófocles. Seguimos subiendo  y nos encontramos con el Partenon, te das cuenta que en verdad la construcción es enorme, esa una de las mejores conservadas, pero es increíble saber que estuvo más conservada aún durante más de mil años y que por el año 1687, los turcos ocuparon el lugar como deposito de pólvora y en el sitio que tuvo la ciudad por los venecianos, el deposito explotó y tuvo resultados catastróficos. Es más, desde que los británicos estuvieron por ahí, se llevaron fachadas y otros elementos del lugar que se conservan en el museo británico. Aún con todo esto, se observa el lado occidental mejor conservado. El lugar es hermoso, tienes vista de toda la ciudad, nos quedamos ahí un rato a sacar fotos y a descubrir otros lugares de ahí arriba, como el Templo de Niké que habíamos visto desde abajo el día anterior y la fachada del Erecteón. Como dato, están tratando de restaurar el Partenon desde hace más de 25 años, los trabajos han estado detenidos varias veces por falta de recursos y por la crisis, así que espera encontrar siempre andamios rodeando los monumentos, que muchos llevan ahí años y no tienen luces para terminar. Otro dato, es que la misma Acrópolis y el Partenon tuvo cientos de años de construcción, es porque cuando se empezó a construir, por el 400 a.C. se quedaron cortos de recursos por crisis económicas de esos años, como vemos, la falta de planificación económica es algo adherido en la idiosincrasia griega.

Teatro de Herodes Ático (174 d.C.)
Teatro de Dionisio (407 a.C.) Ahí se estrenó Antígonas
El Partenón (432 a.C.). Dedicado a la diosa Atenea, quien cuida la ciudad.
Desde arriba de la Acrópolis, el calor los espantaba a todos.
Vista de la ciudad desde la Acrópolis
Desde un monte a otro monte
El Partenon desde otro ángulo
Sigue el recorrido en la Acrópolis
Erectión, con sus columnas Cariatides
El Hefestión, del 449 a.C., que durante varios siglos fue usado como templo cristiano

El pequeño monasterio
Luego de esto enfilamos nuevamente a Monastiraki (En griego Μοναστηράκι) es un barrio de vendedores por excelencia. Es una plaza donde encuentras callejones de artesanos y diversos recuerdos de la ciudad, son varios brazos donde se desprenden artistas vendiendo sus objetos, cerámicas, cueros y demás cosas. Los recuerdos de la ciudad son bastante simples y dejan mucho que desear, yo me quedé con camisetas de fútbol por precios bien módicos (10-15 euros). Aprovechamos de comprar en el lugar y de almorzar algún Kebab con nombre griego en las esquinas de las calles Ifestou con Kinetou, mucha salsa de yogurt encima por supuesto, pedimos una cerveza y una fanta, un "fanshop" que los griegos miraban con curiosidad y que buscaban imitar.
Monastiraki significa Monasterio y es por la iglesia que está en medio de la plaza, una pequeña construcción de aspecto bizantino pero donde se realizó culto islam. El barrio es de comerciantes y es ideal para perderse.

Fumar mata, eso dice.
Amable Atenas, funciona lento, todo el mundo anda relajado y es imposible apurar a alguien, a excepción si vas en un taxi. Nos gustó y es una ciudad para recorrer en unos 2-3 días. Si quieren partir desde Atenas hasta las cicladas, es bueno tener pasajes comprados de antes, aunque nosotros íbamos a embarcarnos justo el fin de semana largo del 15 de agosto, que allá igual es feriado y nos encontramos con dificultades para encontrar ticket, aunque logramos hacerlo. Hay varias empresas, pero llegando al Pireos, que es como el puerto, pueden ir ventanilla por ventanilla preguntando si hay tickets. Queríamos ir por tierra hasta Tesalónica, pero quedamos cortos de tiempo, igual desde la estación de trenes Larissa pueden tener suerte para ir al lado norte de Grecia, pero había más transportes hacia Albania en el lugar donde estábamos nosotros. Finalmente nos conseguimos unos tickets a la isla de Milos para continuar el viaje.




Fanshop y el kebab griego
Como dato, si dices "Athina" está bien, se pronuncia "Acina" y es mejor visto por los atenienses y conseguirás buen trato. Por otro lado si dices Hellas, te van a aplaudir. Grecia es un nombre que pusieron los británicos, los griegos se consideran helénicos y si los reconoces como tal, serás bien visto, ya sabemos que no hay mucha simpatía con los británicos, así que prefiere aprender a saludar en griego en inglés. Buenos dias se dice "Kalimera". También encontramos muchos griegos que dominaban el español, así que cuidado con lo que hablan en la calle. Como contaba, teníamos intenciones de buscar traslado terrestre desde Atenas Estambul, pero desistimos ya que la mayoría de los traslados terrestres eran hacía Albania o Bulgaria, nunca logramos encontrar algo directo, desistimos luego de ver poca información al respecto, nos hubiera gustado unir estos dos puntos por tierra, pero mucho tiempo no teníamos. Decidimos irnos rumbo al Egeo, hasta la isla de Milos, pero eso ya es parte de otra historia.


El filósofo

1 comentario:

  1. Me has hecho recordar mi viaje a esta bella ciudad, todo sigue igual que como lo cuentas!
    Tristemente no pudimos visitar ninguna isla, aunque ya había escuchado hablar de Milos así que quizás para la próxima vez jeje
    Por curiosidad, quería saber si la chica que os había hecho el tour era la misma que nos tocó a nosotros, sin embargo creo que cambiaron de web o algo (ya que parece que hay poco movimiento en la web que enlazas, quizás también por la situación que esta sufriendo el turismo ahora...).
    En cualquier caso, yo contraté mi free walking tour de Atenas aquí:
    http://freetouratenas.top/
    Un saludo y gracias por este contenido!

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